Fremont, California (EE. UU.) – Blackmagic Design anunció hoy que el nuevo largometraje de antología «What Doesn’t Float» se rodó con una unidad cinematográfica digital Blackmagic Pocket Cinema Camera 4K, mientras que su posproducción, incluida la edición y el etalonaje, se llevó a cabo con DaVinci Resolve Studio. El director Luca Balser reconoce el diseño compacto y la versatilidad de la cámara, así como la capacidad que brinda al equipo de trabajo de grabar en diversos entornos por toda la ciudad de Nueva York.
«What Doesn’t Float» cuenta la historia de siete neoyorquinos en momentos de desesperación. Esta comedia oscura está protagonizada por Pauline Chalamet, Larry Fessenden, Cindy De La Cruz y Roger Howarth, entre otros artistas.
Al emplear dos unidades Blackmagic Pocket Cinema Camera 4K para grabar en formato Blackmagic RAW, Balser observó que su versatilidad les permitió trabajar con suma facilidad en cualquier entorno. «Rodamos en distintos lugares de la ciudad de nueva York, la mayoría al aire libre durante el otoño e invierno con muchas noches de bajas temperaturas. Fuimos a todos lados, desde Fort Tilden, en Rockaway, hasta terrazas en el barrio Hell’s Kitchen y astilleros en Staten Island.

«Tuvimos la posibilidad de colocar las cámaras en espacios muy extraños en términos de espacio. Nos brindaron muchísima movilidad, por lo que pudimos desplazarnos rápida y eficientemente de un lugar a otro», comentó. «Para una historia, utilizamos la cámara en un pequeño bote pesquero en el medio de Lower New York Bay, en aguas lejos de ser calmas, y nos salvó su tamaño compacto y portabilidad. Visto y considerando la amplia variedad de lugares y entornos en los que lo utilizamos, tal como sobre una motocicleta y una canoa en un momento, este modelo nos proporcionó mucha flexibilidad».
«“What Doesn’t Float” estuvo inspirada en el amor por el formato antológico de la ciudad de Nueva York. Desde que soy pequeño he visitado muchos de los lugares que aparecen en la película. Suelen ser espacios a las afueras de la ciudad, cerca del agua, con una sensación de soledad y estado transitorio. Siempre me fascinó el hecho de que Nueva York es una ciudad portuaria, a pesar de que la mayoría de nosotros casi nunca interactúa con el agua. Estas cámaras nos permitieron filmar estos lugares con una facilidad que jamás consideré posible con un soporte más grande y costoso», explicó Balser.
Al comenzar con la etapa de posproducción, Balser señaló: «Fue muy importante para mí desarrollar la estética de la película a medida que la iba editando. La luz y la textura son elementos fundamentales en este proyecto, y sentí que, al editar archivos sin contraste o con una tabla de conversión (LUT) básica, se podría socavar el proceso. DaVinci Resolve es un programa muy intuitivo, y la facilidad de alternar entre los módulos Color y Edición resultó extremadamente útil. Así que pude crear una apariencia durante el montaje de las imágenes».

Balser empleó DaVinci Resolve Studio, junto a un dispositivo UltraStudio Monitor 3G, en la posproducción principalmente para la edición y el etalonaje, aunque también incursionó en los módulos Fairlight y Fusion. «Empleamos el módulo Fairlight para crear mezclas temporarias y comenzar con el diseño de sonido y música durante la edición “offline”. Al contar con un espacio exclusivo para el audio dentro del programa fue excepcional, ya que nos permitió enfocarnos realmente en el sonido como parte integral de la historia», manifestó Balser. «Adicionalmente, aunque la mayor parte de la película se grabó en el set, el módulo Fusion resultó útil en ciertas tomas en las que necesitábamos eliminar algunos elementos».
«Al igual que con cualquier programa de edición no lineal, uno espera que el software permita concentrarte en el trabajo creativo, en vez de estar abrumado por los aspectos técnicos. DaVinci Resolve facilitó un proceso de edición muy natural, y la posibilidad de pasar de un módulo a otro realmente lo destaca del resto», añadió Balser. «DaVinci Resolve Studio es una aplicación extraordinaria, con el cual fue posible llevar a cabo todo el proyecto sin tener que migrar a otro programa. Todo fue sumamente intuitivo y confiable, desde la sincronización y la edición de las imágenes hasta la mezcla de audio y el etalonaje».
Al trabajar con un presupuesto acotado, Balser observó que le interesó el formato antológico debido a que era una manera tangible de realizar una película con recursos limitados. «Rodamos una historia y luego nos tomamos un descanso a fin de recaudar fondos para la siguiente. Dado que iba etalonando a medida que editaba el material, podíamos compartir muestras del largometraje sin terminar, pero que lucía mucho mejor que un típico montaje preliminar o avance promocional», explicó.
«Aunque contábamos con un presupuesto muy limitado, con estas cámaras ni se nota. Gracias a su precio económico, pudimos comprar dos unidades y grabar con ambas algunas de las secuencias más complejas», comentó para finalizar. «Dado que era una producción hecha a pulmón, realmente nos permitieron lograr un resultado de calidad excepcional. Varias personas me han preguntado con qué cinta grabé la película, y siempre se sorprenden escuchar que se rodó en formato digital, lo que es evidencia de la calidad de imagen que ofrecen las cámaras y las herramientas de etalonaje extraordinarias que incluye DaVinci Resolve. El tamaño del sensor Micro Tres Cuartos de las cámaras es parecido al de un negativo de 16 mm, y la combinación de los objetivos clásicos con esta versión aportaron imágenes con una estética muy agradable que imita una cinta de 16 mm a la perfección».
