Largometraje Jacob the Baker filmado y etalonado con productos de Blackmagic Design

Fremont, California (EE. UU.) – Blackmagic Design anunció hoy que el largometraje independiente «Jacob the Baker» se rodó con la unidad cinematográfica Blackmagic Pocket Cinema Camera 6K, y su etalonaje se llevó a cabo en DaVinci Resolve Studio, el programa de edición, corrección cromática, efectos visuales y posproducción de audio.

Cuando una joven periodista escéptica recibe la tarea de entrevistar al autor de una exitosa serie de libros, descubre la increíble historia de cómo Jacob, un personaje ficticio, les brinda ayuda y esperanza a un sinfín de personas en todo el mundo. Basada en la serie de libros homónima, la película fue dirigida por Gev Miron, mientras que la cinematografía estuvo a cargo de Omer Lotan. El colorista Francisco Lorite, de Different by Design, fue el responsable del etalonaje.

El desafío de producir «Jacob the Baker» se debió a la diversidad de lugares donde se rodó, necesarios para contar la historia. «Sin dudas hablamos muchísimo acerca de la cinematografía antes de empezar a grabar», expresó Miron. «La razón principal por la que tuvimos que estar aún más preparados de lo habitual fue que teníamos múltiples unidades rodando en diferentes países, y necesitábamos asegurarnos de que todos estuvieran en sintonía, tanto en lo que respecta a la estética como a cada aspecto de la producción».

Miron y Lotan ya habían trabajado juntos, y Lotan estaba emocionado con la idea de filmar una historia tan desafiante. Eligieron el modelo Blackmagic Pocket Cinema Camera 6K no bien comenzaron el proceso de preproducción. «Gev y yo ya hemos empleado la cámara y conocíamos todas las ventajas que brinda», expresó. «Sabía que lograríamos la estética cinematográfica que deseábamos, independientemente de los desafíos del rodaje. Contábamos con una amplia variedad de condiciones para grabar, desde exteriores para escenas de día y de noche e interiores en casas con espacio limitado, hasta vehículos en movimiento, trabajo panorámico con ledes y composiciones de imágenes por crominancia. Con todo eso, me sentí seguro de empezar esta aventura con el modelo Blackmagic Pocket Cinema Camera 6K como la unidad principal para capturar las visuales de la película».

A pesar de que Miron y Lotan ya estaban familiarizados con la calidad de las cámaras de Blackmagic, sintieron que era perfecta por muchos otros motivos. «Su tamaño compacto fue una de las razones principales por la cual decidimos utilizar la versión Blackmagic Pocket Cinema Camera 6K», señaló Miron. «Teníamos que cambiar de lugar muy rápido y, en algunos casos, rodar en espacios pequeños, con acceso restringido, o abiertos al público en general. Queríamos tener el menor impacto posible y, al mismo tiempo, conservar una calidad de imagen óptima con grabación interna y en formato RAW. El modelo Blackmagic Pocket Cinema Camera 6K fue perfecto en ese sentido y nos ayudó muchísimo a lograr las tomas que necesitábamos».

Para las tomas en el vehículo andando, el equipo requirió de imágenes base en 360 grados para la pantalla de proyección de ledes. «Montamos la cámara sobre el automóvil en un estabilizador y grabamos las imágenes base en formato RAW 6K a 60 f/s de noche mientras conducíamos por la carretera», explicó Miron. «La cámara funcionó realmente bien en condiciones de escasa iluminación, y solo tuvimos que implementar pocos ajustes cromáticos en el material grabado antes de que estuviera listo para las pantallas de ledes».

«Al grabar con esta cámara compacta e intuitiva, tuvimos más libertad en algunos espacios reducidos y pudimos pasar desapercibidos en áreas urbanas», añadió Lotan. «Fue esencial no llamar demasiado la atención al filmar en zonas sensibles, por ejemplo, en la ciudad vieja de Jerusalén. Pero más allá de la facilidad de uso, personalmente siempre me ha gustado la textura de la colorimetría de Blackmagic, y creo que ha demostrado sus virtudes una y otra vez durante este proyecto».

Un elemento fundamental al momento de administrar los diversos sets en exteriores fue lograr una consistencia en calidad de imagen y formato. Fue primordial saber que, independientemente de donde se rodara, los originales de la cámara serían en formato Blackmagic RAW. «En la trama de la historia danesa, por ejemplo, tuvimos que filmar en general con la iluminación disponible, ya sea de la luz del día o una luz de tungsteno», afirmó Lotan. «Debido a que ocurre cerca de Navidad, también había muchas luces navideñas en los planos y distintas fuentes cálidas que competían con la iluminación del ambiente. Eso, combinado con el cielo frío y nublado, hizo que fuese complejo lograr un balance cromático en el set. Le destinamos bastante tiempo a esto en la etapa de etalonaje, mientras que intentamos conservar los tonos de piel y la estética deseada. Resultó muy útil poder ir a los archivos Blackmagic RAW y hacer ese tipo de ajustes».

El etalonaje inicial lo crearon Lotan y Miron, a fin de cumplir con algunas necesidades de proyección tempranas, en DaVinci Resolve Studio. Aunque ambos tienen vasta experiencia en dicho programa, estuvieron muy conformes al descubrir la flexibilidad que ofrece el formato Blackmagic RAW. «Durante una de nuestras sesiones, en las que luchamos por rescatar algunos momentos clave en dos secuencias, recuerdo descubrir “por accidente” que podíamos cambiar retroactivamente el material grabado a la colorimetría de quinta generación, la cual no estaba disponible cuando captamos dichas imágenes», confesó Lotan. «Una de las escenas consistía en la periodista conduciendo hacia la entrevista, y la otra mostraba al personaje danés caminando al aire libre por la naturaleza, a eso del atardecer. Ambas escenas se filmaron solo con la luz disponible y, al cambiar de la colorimetría de cuarta a la de quinta generación, tuvimos la posibilidad de recuperar algunos detalles sobrexpuestos que ya dábamos por perdidos».

Al poco tiempo, se convocó a Lorite para que creara la estética final, quien descubrió que el proceso de lograr un equilibrio cromático en las tomas de sitios tan diferentes fue un desafío interesante. «La película da la vuelta al mundo y cada historia tiene su propia identidad que debemos conservar, una singularidad en términos de luz y color, mientras que, en paralelo, necesita coexistir en la misma película», explicó Lorite. «Fue fundamental trabajar con archivos RAW a fin de lograr una calidad de imagen importante y tener un “negativo” con más control y una plasticidad más variada».

Lotan y Miron trajeron una colección de referencias visuales que ya habían recopilado con los años al dedicarse al arte del cine. «Teníamos imágenes específicas de cada país que nos guiaban en términos generales en cuanto a la estética deseada. Cuando se sumó Francisco, ahí se volvió un debate acerca de cómo tomar lo realizado y mejorarlo», añadió Miron.

Lorite tuvo la posibilidad de adaptar el etalonaje original a su estilo de trabajo con suma rapidez. «Creé una estructura nodal fija con nodos seriales y en paralelo, en la cual incorporé nodos compuestos a fin de organizar las correcciones anteriores. Esto ayudó muchísimo a mantener cierto orden en el proceso y un espacio de trabajo más despejado».

Lorite reflexionó sobre las herramientas que facilitaron el etalonaje de esta película tan particular: «Para este proyecto, mi programa predilecto fue Resolve en sí y la flexibilidad que nos brinda al pasar de las correcciones iniciales al etalonaje final», afirmó Lorite.

«Gran parte de la magia de Francisco se puso en juego cuando necesitamos realizar modificaciones que requerían conservar los tonos de piel y, al mismo tiempo, aplicar ajustes generales a la imagen», aportó Miron. «Los archivos Blackmagic RAW y sus habilidades fueron esenciales para almacenar algunas de las tomas más desafiantes que exigían restaurar luces, comparar la apariencia de las tomas ya grabadas en distintos momentos, pero que debían funcionar juntas en la misma escena y lograr el equilibrio adecuado entre planos en interiores y exteriores en los que se filmó a los actores frente a ventanas».

Miron disfrutó del proceso de trabajar con Lorite, dado que juntos descubrieron la estética final de la película. «Pasamos mucho tiempo tratando de dar con la apariencia perfecta de cada lugar, y muchos de esos aspectos surgieron después de charlas acerca de lo que se intenta transmitir con cada historia en estos sitios, así como particulares de cada uno, ya sea el tiempo, la arquitectura, la calidad de la luz, etc. Resolve es una gran herramienta para explorar, ya que es muy intuitiva y nos permitió probar diferentes elementos por nuestra cuenta, incluso antes de llevar a cabo las sesiones con Francisco».

«Jacob the Baker» se encuentra disponible en Prime Video.