Fremont, California (EE. UU.) – Blackmagic Design anunció hoy que la nueva película de misterio «Dark Noise» se filmó con cámaras cinematográficas digitales de la compañía, mientras que la posproducción se llevó a cabo en DaVinci Resolve Studio, el programa de edición, etalonaje, efectos visuales y mezcla de audio desarrollado por la empresa. A tales efectos, también se empleó una consola de la línea Fairlight.
«Dark Noise» narra la historia de una joven mujer que recibe grabaciones de audio de su padre, un biólogo que ha desaparecido en un parque nacional distante. Al seguir dichas pistas para intentar encontrarlo, tropieza con una peligrosa operación del crimen organizado. Protagonizada por Imogen Sage, Callan Colley y Steve Le Marquand, y escrita y dirigida por Clara Chong, la película se filmó en parajes remotos de Australia al comienzo de la pandemia de COVID.
Ben Allan se desempeñó como director de fotografía y colorista, mientras que Chong fue responsable de la edición audiovisual. Allan es la persona más joven en recibir un reconocimiento oficial de la Sociedad Australiana de Directores de Fotografía (ACS) y el único cineasta del mundo acreditado como colorista por la Sociedad Internacional de Coloristas. Además, cuenta con más de 1500 películas, series de televisión y anuncios publicitarios en su haber. Por su parte, Chong tiene casi 30 años de experiencia en la industria, tras haber comenzado en Tokio y capacitarse en Nueva York.
En «Dark Noise», el equipo recurrió a los modelos URSA Mini Pro 4.6K G2 y Pocket Cinema Camera 6K, así como al programa DaVinci Resolve Studio para editar y etalonar las imágenes y mezclar el audio.

«Los productos de Blackmagic nos permitieron lograr nuestro objetivo de manera consistente, desde el rodaje hasta la posproducción. No creo que hubiéramos podido filmar esta película sin su ayuda», afirmó Allan.
Gran parte del largometraje se grabó en bosques densos situados a varias horas de Sídney, con mal tiempo y durante la noche. Debido a las restricciones impuestas por la pandemia, en ocasiones Allan filmó con un equipo de personas muy reducido, o incluso solo con Chong. Sin embargo, el diseño compacto de los modelos URSA Mini Pro 4.6K G2 y Pocket Cinema Camera 6K y su capacidad para captar imágenes cinematográficas en condiciones de escasa luminosidad le permitieron grabar todas las tomas necesarias.
«El tamaño de ambas cámaras y el hecho de que bastara una sola persona para manejarlas fue de gran ayuda. Estábamos a una hora y media del centro de asistencia más cercano, por lo cual confié en el buen funcionamiento de las unidades», agregó Allan. «Por otro lado, como colorista, camarógrafo y director de fotografía, tengo una perspectiva muy particular. Sé exactamente lo que necesito en cada toma. Especialmente durante la noche, y al filmar con una cantidad de luz mínima, preciso tener certeza de que las cámaras captarán todos los detalles posibles. El formato Blackmagic RAW me proporcionó lo que requería con una gran cantidad de información en las imágenes y sin ocupar demasiado espacio de almacenamiento».
Durante el rodaje, Allan consideró en todo momento la posproducción del audio. La protagonista de la película es una profesional en materia de audio y utiliza el sonido para investigar la desaparición de su padre. Junto con el etalonaje, el uso creativo del sonido es casi como un personaje más que deber guiar la narrativa y la emoción de los espectadores. Para ello, Allan recurrió a los dispositivos Fairlight Desktop Console y DaVinci Resolve Mini Panel. «El tamaño compacto de estos equipos me permitió por primera vez contar con una amplia gama de controles al alcance de la mano y en un mismo estudio».

«Dark Noise» fue la primera película en la cual Allan recurrió a las herramientas de audio Fairlight, por ejemplo, el modelo Fairlight Desktop Console. Esta completa mesa de mezclas ofrece 12 atenuadores y mandos giratorios sensibles al tacto, pantallas LCD para cada canal, botones para realizar ajustes y controles de reproducción y desplazamiento, entre otras prestaciones. «Dado que los productos de la línea Fairlight han sido específicamente diseñados con el propósito de mezclar el audio de las películas, brindan todas las funciones necesarias», señaló Allan. «Asimismo, la consola Fairlight incluye controles físicos de gran precisión, los cuales son fundamentales en este tipo de producciones».
Gracias a la configuración del estudio, Allan logró trabajar durante los períodos de confinamiento en la pandemia y terminar la película a tiempo para su lanzamiento en mayo de este año.
«El color y el sonido influyen en los espectadores de igual manera, proporcionando una reacción sensorial y emocional. En “Dark Noise”, las sombras juegan un papel importante. Es extraordinario poder manipular las zonas más oscuras de la imagen en Resolve, así como el sonido y su ubicación», expresó. «En un momento, estaba trabajando en el audio de una escena y se me ocurrió algo que podíamos hacer con el color. Después de realizar los ajustes pertinentes en la consola, con un solo clic accedí al módulo Color, me dirigí hacia el dispositivo Mini Panel y de inmediato capturé la inspiración visual para dicha escena. Hasta el momento, no había sido posible llevar esto a cabo con tanta calidad».
«Me encantó trabajar en Resolve para “Dark Noise” porque me resultó mucho más fácil hacer coincidir el color con el audio. La combinación fue sorprendente. El programa ha cambiado el proceso de creación de los cineastas y ha aumentado su eficiencia de una manera extraordinaria al ofrecer todas las herramientas necesarias en una misma aplicación. Es posible mezclar distintas resoluciones y formatos de audio según los requerimientos de entrega de forma rápida y eficaz. Me alegra haberme decidido a usarlo», comentó.
«Dark Noise» se estrenó en los cines australianos el pasado mes de mayo y estará disponible en todo el mundo a través de distintas plataformas de transmisión.
